Caracas, 04 May. ABN.- La Asamblea Nacional de Izquierda en Chile, que agrupa y organiza a distintos partidos y movimientos sociales del país austral, nació de la necesidad de un cambio profundo en el sistema político chileno, desgastado y sin cumplir las expectativas de la población.De esa manera describieron los coordinadores nacionales sindicales del Movimiento Socialista Allendista de Chile, Rony Núñez Mesquida y Juan Ignacio Reyes, la situación política, social y económica que atraviesa Chile y destacaron que ante ese desgaste la Asamblea Nacional de Izquierda (con 2500 delegados en todo el país) se ha presentado como una opción que toma en cuenta las decisiones del poder popular desde las bases.
“Dentro del Partido Socialista de Chile (PSC) hay una vertiente que se ha vuelto hacia el neoliberalismo y por otro lado se forma una Asamblea Nacional de Izquierda. Ahí empieza un proceso paulatino de acumulación de fuerzas que han generado una Asamblea Nacional de Izquierda”, apuntó Núñez Mesquida.
Debido a esas divisiones, Jorge Arrate, líder del partido y ex ministro durante la administración del presidente Salvador Allende, abandonó su militancia en el PSC y el Movimiento Socialista Allendista, como plataforma política, lanzó su candidatura presidencial en enero de 2009.
La Asamblea Nacional de Izquierda sesionó el 25 y 26 de mayo, y llegó al acuerdo, por elección popular y apoyo de 82%, que el candidato único a apoyar será Jorge Arrate.
Antes de la elección de Arrate, la Asamblea Nacional contó con un apoyo fundamental de asambleas comunales, de manera tal que las decisiones se tomen desde las bases, como lo describió Núñez Mesquida.
En esa Asamblea Nacional, destacó, “confluyen 2500 delegados de todos los rincones de la geografía chilena”. A eso se le adiciona una nutrida delegación internacional de países como Bolivia, Venezuela, Cuba, Argentina, Perú, Brasil, entre otros.
Además de esos 2500 delegados electos, participan dirigentes sindicales y campesinos, entre otros.
El punto de comunión de la Asamblea es la retoma del programa político de Allende. Ven como tarea fundamental el papel protagónico del poder popular y, entre otros puntos, la renacionalización del cobre.
Consideran que la participación del Estado en las actividades económicas es de vital importancia. Sin embargo, “hoy en día el Estado no puede constitucionalmente participar en actividades económicas”, más allá de su tarea de fiscalizar.
Otros de sus puntos principales son una nueva Constitución con Asamblea Constituyente, la construcción de una democracia plena sin exclusiones y una nueva estrategia de crecimiento económico que respete los derechos de los trabajadores y defienda los recursos naturales y el medio ambiente.
Arrate deberá ahora competir en los comicios presidenciales el 11 de diciembre del presente año contra los abanderados de los dos bloques tradicionales del país: el senador y ex mandatario Eduardo Frei, de la gobernante Concertación; y el empresario derechista Sebastián Piñera, de la Alianza por Chile.
Agencia Bolivariana de Noticias
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