Las muestras develaron la generalizada ignorancia que se tiene en nuestro continente sobre los países africanos.
El realizador chileno Rodrigo Gonçalves mostró tres de su numerosa producción de documentales realizados en su estadía en Mozambique, donde vivió por más de una década, desde 1983: “Papa Samora”, “Mozambique, Imágenes de un Retrato” y “Pensar Alto”, los que con diversos temas mostraron certeras pinceladas de la realidad mozambicana.
En “Papa Samora” se pudieron conocer las espontáneas respuestas de los niños ante la muerte del primer presidente del país, Samora Machel, en un accidente aéreo en 1986 cuyas causas nunca fueron claramente establecidas.
“Pensar Alto” entrega imágenes del dolor producido en la población por la larga guerra que sostuvo Mozambique para defender el proceso de consolidación de su independencia. Pero también son imágenes de esperanza de un espíritu que no se dejó dominar por el hambre y las heridas que el conflicto les produjo.
Por último, se vio “Imágenes de un Retrato”, un completo registro del pintor, poeta, político independentista y escultor mozambicano Malangatana Ngwenya, fallecido en enero de 2011 en Portugal; uno de los artistas plásticos africanos más célebres a nivel mundial.
La jornada finalizó con un diálogo entre el realizador y los asistentes, donde destacó la presencia de un grupo de personas que vivieron el exilio en aquel lejano país y que recordaron con manifiesta emoción la solidaridad recibida en ese lejano país desde 1973.
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